Cuando el cine juega con la androginia (1): La teniente O'Neill (Demi Moore)

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Demi Moore es una chica muy muy mala, adicta a los desnudos, los jovencitos y la ambigüedad. Su primer coqueteo con la androginia tuvo lugar en el folletín lacrimógeno titulado Ghost, en el que lucía un aire de inocencia y un corte de pelo muy a lo chico que excitó hasta al menos pintado. A mí al menos me pone durísimo.
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Pero, ni corta ni perezosa, nuestra querida Demi decidió llevar su talento hermafrodítico al límite en La teniente O'Neill, bodrio insufrible (y van...) de Ridley Scott en el que lo único que merece la pena es ella, sólo ella, ejerciendo el papel de hembra militar exageradísimamente andrógina, con un rapado, unos bíceps y unos abdominales que muchos de nosotros quisiéramos acompañados de unas ultrasiliconadas tetas y un culito que ni el de Helena de Troya. Absolutamente deliciosa.

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¡Chúpame la polla!
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Aquí os dejo unas imágenes de la película y de la Demi de aquellos tiempos:

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Y de regalo, más fotos y un vídeo de la Demi Moore 100% mujer:
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